Españoles por el mundo
Gliwice homenajea a Gerard Badía
Antes del inicio de la Ekstraklasa, el Piast Gliwice rindió homenaje al que fuera su capitán durante las últimas temporadas, el español Gerard Badía.
El extremo catalán Gerard Badía fue homenajeado por el Piast Gliwice, club al que capitaneó durante las últimas temporadas, antes del inicio de la Ekstraklasa 2021/22. El ya jugador del FC Ascó no renovó su contrato con la entidad polaca, pero regresó a Gliwice, su segunda casa, para recibir un último adiós por parte de compañeros y aficionados. Badía se enfundó la camiseta del Piast y, luciendo el brazalete de capitán, saltó al campo acompañando a los 11 jugadores alineados por Waldemar Fornalik para el partido frente al Raków. Posteriormente, realizó el saque de honor, le traspasó la capitanía a Czerwinski y fue despedido con un pasillo formado por los jugadores de ambos equipos.
Badía es todo un ídolo en Gliwice, una ciudad de menos de 200.000 habitantes situada en el voivodato de Silesia. Badi, como se le conoce en Polonia, llegó al Piast en 2014 y, bajo su capitanía, el club conquistó la primera y hasta ahora única Ekstraklasa de su historia. En los siete años que jugó para los enfermeros, el extremo catalán disputó más de 200 partidos en los que marcó 31 goles y repartió 41 asistencias. «Formo parte de la historia del club por muchas cosas. Lo más especial fue ganar una liga, pero voy a quedar por ser como soy: una persona abierta que nunca ha tenido ningún problema con nadie. Mucha gente dice que esta orgullosa de que una persona como yo sea el capitán del equipo y eso me llena muchísimo«, reconocía Badía en una entrevista publicada en el canal de YouTube de Migrantes del Balón el pasado mes de marzo.
No es de extrañar, por lo tanto, que durante su homenaje muchos aficionados del Piast Gliwice rompieran a llorar. Gerard Badía, que estuvo acompañado por sus hijas sobre el césped, se llevó como recuerdo un retrato compuesto por fotografías de los fans y una de sus camisetas con el número 21, el dorsal que siempre lució en Gliwice, a la espalda. Tras casi ocho años en Polonia, el español afronta ahora una nueva etapa en la que competirá en la Tercera RFEF con el FC Ascó. Ya no sentirá el aliento de Gliwice, pero sí el de sus familiares más cercanos. Badi vuelve a casa convertido en una estrella.