Españoles por el mundo
Sergio Cirio, el «killer» de Adelaide
Cuando llegas desde el fútbol modesto el ser trabajador suele ser una de las señas de identidad. Sergio Cirio, antes de llegar a Australia, ya había probado en la liga griega con éxito en lo personal pero con poca suerte a nivel de equipo: el Atromitos, su equipo en el país heleno, descendió de categoría. Su aventura en Australia, sin embargo, está teniendo mejores resultados para el catalán.
1 metro 63 centrímetros. Esta es la altura de Sergio Cirio. Tan solo un jugador (Ludovic Boi, con origen en las lejanas islas Mauricio y que juega actualmente en el Floreat Athena de la National Premier League de Western Australia) en la historia de la A- League mide menos que él. Esto es fundamental en su juego. Ya sea por banda derecha o izquierda, Cirio basa su juego en realizar diagonales desde los costados tenga o no tenga defensores delante. Una vez se deshace de los defensas entra en el área como un rayo y, según la situación, dispara o asiste.
Comencemos desde el principio. Si Albert Riera era un desconocido, Cirio cuando llegó contaba con dilatada experiencia en la Segunda B española y tan solo la mala suerte impidió que llegase a jugar en Segunda División A. A excepción de la ya menciona etapa en Grecia, su carrera siempre se había transcurrido en torno al mar Mediterráneo. Probó en Badalona, en el Europa de su Barcelona natal, en el Orihuela y hasta en el filial del Mallorca hasta llegar al equipo donde consiguió la estabilidad: L`Hospitalet. Son varias las efemérides que se pueden recordar de su paso por el equipo catalán: desde ser el máximo goleador de su grupo en la 12/13 (consiguiendo también la primera posición en liga) y tercero de toda la competición a la clasificación con su equipo para los treintaidosavos de final de la Copa del Rey en la 11/12, en la que fueron barridos por el Barcelona (0-1 en la ida, 9-0 en la vuelta).
En 2013 decidió emprender su viaje a Australia junto con Isaías (jugador), Pau Martí (segundo entrenador) y Josep Gombau (entrenador), que fue quien les reclutó. Su impacto fue inmediato y tardó solo 111 minutos en marcar su primer gol. Esa temporada fue la mejor en cuanto a goles se refiere ya que anotó 8 dianas, la mayoría en la recta final de la temporada, cuando el equipo se jugaba conseguir una buena clasificación de cara a los playoffs por el título.
Fue en su segunda temporada cuando llegó su momento de gloria y donde realizó posiblemente la mejor temporada de su carrera. Aunque en su cuenta goleadora en liga no pudo superar su marca de 8 goles (se quedo en 7 en 29 partidos) realizó en la FFA Cup la proeza de marcar en cada una de las cinco rondas del torneo, final incluída, para conquistar el primer título de Adelaide desde 2007. Fue nombrado mejor jugador del torneo y mejor jugador del equipo a final de temporada, consiguiendo en total unos grandes números entre las dos competiciones: 13 goles en 34 partidos (en liga fue el único jugador de campo en jugar todos los minutos de la temporada).
La presente temporada está siendo más complicada para Cirio. Le ha costado adaptarse al juego de Amor, el nuevo entrenador y exjugador blaugrana, y no a encontrado puerta con tanta facilidad como anteriormente. La marcha de algunos compañeros del equipo además ha debilitado al club y esto se nota especialmente en la producción goleadora de los reds. Aún así, con el gol que anotó in extremis en la Champions de Asia, se convirtió en el único jugador del club que esta temporada ha marcado en las tres competiciones, ya que fueron eliminados por el Shandong. Con un total de 6 goles en lo que va de temporada, ahora mismo suma entre todas las competiciones 27 goles con el Adelaide, lo que le coloca a las puertas de entrar en el top 25 histórico de más goles con equipos A- League.
Desde su llegado a Australia nadie en el Adelaide se acerca a sus registros goleadores (el más cercano es el medio argentino Carrusca con 20 goles), ganándose con ello el respeto del fútbol aussies. En menos de un mes Sergio Cirio cumplirá 31 años, por lo que todavía le queda mucha carrera por delante, esperemos, en la A- League.