Españoles por el mundo
Alberto Bueno, el difícil reto de triunfar como «dragón»
El delantero madrileño del Oporto únicamente ha jugado cuatro partidos de liga y no ha llegado disputar un solo minuto en competiciones europeas
El pasado 25 de mayo de 2015 el Oporto hacía oficial el fichaje de Alberto Bueno. Una incorporación que ilusionó a los aficionados del conjunto luso, que veían en el delantero español un buen recambio para Jackson Martínez, a punto de hacer las maletas rumbo al Manzanares. El madrileño, de 27 años, llegaba a Do Dragao tras una espectacular temporada en el Rayo Vallecano, donde se convirtió en el máximo goleador en Primera en la historia del equipo franjirrojo con 27 goles en dos campañas. Para el recuerdo quedará siempre el póker de goles que, en quince minutos, consiguió ante el Levante.
Bueno llegaba como una petición expresa de Julen Lopetegui para reforzar el ataque de los “dragones”. Además, el canterano madridista iba a compartir vestuario con un nutrido grupo de españoles como Marcano, Tello, Casillas o José Ángel, quienes harían más fácil la adaptación al nuevo país y a la liga portuguesa. Sin embargo, el idilio de Bueno se truncó a las primeras de cambio. Lopetegui no le dio la confianza esperada y apostó por otros delanteros desde el inicio de la temporada. Brahimi, Aboubakar, Osvaldo o el propio Tello, actualmente en las filas de la Fiorentina, se convirtieron en los referentes del ataque blanquiazul, relegando a Bueno a disputar la Copa de Portugal. En esta competición ha sido donde el madrileño más ha podido jugar y brillar en las tres eliminatorias que ha disputado. Precisamente dos goles suyos sirvieron para derrotar al Agrense, de la regional lusa, en los dieciseisavos de final.
En la Liga NOS, la Primera división portuguesa, Bueno no ha contado apenas con oportunidades para demostrar que tiene cabida en el once titular de los “dragones”. De las 24 jornadas disputadas, el delantero madrileño únicamente ha jugado cuatro encuentros, un total de 102 minutos, sin haber logrado un solo gol. Peor todavía le han ido las cosas en competiciones europeas, donde no ha llegado a debutar ni en la Champions League ni en la Europa League.
Además, una inoportuna lesión en su pie izquierdo le ha mantenido alejado de los terrenos de juego durante dos meses. Su última aparición tuvo lugar el pasado 20 de diciembre ante el Académica en Do Dragao. La marcha de Lopetegui, destituido a principios de enero, y la llegada de José Peseiro para hacerse cargo del banquillo es la esperanza que tiene Bueno para revertir la situación y volver a ilusionar con su juego y sus goles. Por este motivo, no ha querido salir cedido del club en el mercado invernal y ha apostado por continuar en el Oporto, equipo con el que tiene contrato hasta 2020. El Rayo y Paco Jémez se mostraron encantados con la idea de que el futbolista regresase a Vallecas para disputar el tramo final de la temporada, pero Bueno se ha mantenido firme en su intención de demostrar que su fichaje no fue un error.